Ucrania Ucrania es un extenso país de Europa Oriental conocido por sus iglesias ortodoxas, la costa en el mar Negro y las montañas arboladas. Su capital, Kiev, cuenta con la catedral de Santa Sofía con cúpulas doradas, con mosaicos y frescos del siglo XI. En lo alto, junto al río, Dniéper está el complejo del Monasterio de las Cuevas de Kiev, un sitio de peregrinación cristiano que alberga reliquias de tumbas escitas y catacumbas de monjes ortodoxos momificados. Presidente: Volodímir Zelenski Tendencia Capital: Kiev Superficie: 603,548 km² Población: 44.13 millones (2020) Banco Mundial Continente: Europa Moneda: Grivna Idioma oficial: Ucraniano Ucrania (en ucraniano: Україна; TR: Ukraïna; AFI: /ukrɑˈjinɑ/ )es un Estado soberano ubicado en Europa Oriental. Su forma de gobierno es la república que se rige por un sistema semipresidencial, con la separación de los poderes ejecutivo, legislativo y judicial. Su territorio está organizado según un Estado unitario compuesto por veinticuatro óblast, la República Autónoma de Crimea (pro Rusa) y dos ciudades con un estatus especial: Kiev y Sebastopol y la religión predominante es el cristianismo ortodoxo. La historia de Ucrania comienza en el año 882 con el establecimiento de la Rus de Kiev, una federación de tribus eslavas orientales, que llegó a convertirse en el Estado más grande y poderoso de Europa durante el siglo XI. Tras la invasión mongola de mediados del siglo XIII, la unidad territorial desapareció, y el área fue dividida y gobernada por diversas potencias, incluidas la República de las Dos Naciones, el Imperio austrohúngaro, el Imperio otomano y el Zarato ruso. Durante los siglos XVI y XVII emergió y prosperó el Hetmanato cosaco, finalmente repartido entre Polonia y el Imperio ruso. Tras la Revolución rusa de 1917, surgió un movimiento nacionalista formándose la República Popular Ucraniana, forzada por los bolcheviques a constituirse como la República Socialista Soviética (RSS) de Ucrania en 1921. En 1922, la RSS de Ucrania fue una de las repúblicas fundadoras de la Unión Soviética mediante la firma del Tratado de Creación de la URSS. En la época de la Unión Soviética (1922-1991), en mayor medida que en el Imperio ruso, la población ucraniana fue afectada con limpiezas étnicas como el Holodomor en 1933, donde murieron entre 4 millones y 12 millones de ucranianos y el idioma ucraniano fue suprimido en gran medida en los años siguientes de la rusificación de Ucrania, razón por la cual hay tantos rusohablantes en Ucrania en la actualidad. El movimiento nacionalista ucraniano pasó a la clandestinidad, teniendo importancia entre los años 1942 y 1956 con el Ejército Insurgente Ucraniano (UPA), que intentó establecer un Estado independiente combatiendo a la invasión nazi y a los soviéticos sin éxito. En 1945, la RSS de Ucrania se convirtió en uno de los miembros fundadores de la ONU. Ucrania se convirtió en un Estado independiente el 24 de agosto de 1991, tras el intento de golpe de Estado en la Unión Soviética que condujo finalmente a la disolución de la Unión Soviética en diciembre del mismo año. Desde entonces está en un proceso de transición de «descomunización» hacia una economía de mercado y un Estado democrático. Este proceso llevó a una inmediata depresión económica en la década de los años noventa. Con el comienzo del siglo XXI, Ucrania comenzó a recuperarse económicamente y empezó a moverse hacia una democracia libre con manifestaciones como Ucrania sin Kuchma en 2001 y la Revolución naranja en 2004. Hasta 2007, la economía de Ucrania creció sosteniblemente, siendo uno de los países más prometedores en cuanto a crecimiento económico; sin embargo, a partir de la gran recesión de 2008, padeció una segunda depresión económica. En 2013, tras la decisión del presidente Víktor Yanukóvich de rechazar el largamente negociado Acuerdo de Asociación entre Ucrania y la Unión Europea y, por el contrario, estrechar relaciones con la Federación de Rusia para ingresar en la Unión Aduanera Euroasiática, dio comienzo una serie de protestas, principalmente en Kiev, conocidas como el Euromaidán, que reunió a más de un millón de manifestantes de toda Ucrania. Debido a las crecientes tensiones entre los manifestantes y las fuerzas especiales antidisturbios (los bérkuts) que culminaron con el fusilamiento de estudiantes, empezaron enfrentamientos que dejaron centenares de muertos. Con el éxito de los manifestantes del Euromaidán, Víktor Yanukóvich y su gobierno huyeron a la Federación de Rusia. Tras la huida de Yanukóvich, la Rada Suprema tomó el control del país y Oleksandr Turchínov asumió la coordinación del Gobierno y la presidencia del Parlamento. Ucrania se encontraba totalmente desestabilizada y sus fuerzas armadas se encontraban incomunicadas, situación que fue aprovechada por la Federación de Rusia para ocupar y anexar Crimea y empezar una operación híbrida para ocupar el sureste de Ucrania, lo que dio lugar a protestas prorrusas en Lugansk, Donetsk, Járkov, Odesa, Dnipró y otras ciudades del este de Ucrania. Tras la elección de un gobierno interino, Oleksandr Turchínov el auge de las protestas en Lugansk, Donetsk y Járkov, los separatistas prorrusos declararon la independencia respecto de Ucrania, lo que dio comienzo a la guerra en el Donbás el 6 de abril de 2014. Comunicar es compartir ¡¡¡Comparte!!! Ya tú sabes