Permítanme analizar brevemente cada una de las prioridades, por turno. Prioridad uno : medidas para mitigar la incertidumbre. El mejor antídoto contra la incertidumbre es un entorno macroeconómico estable. • Los bancos centrales deben mantener su agilidad y centrarse en el logro de sus objetivos. Donde la inflación se mantiene alta y persistente, las autoridades deben actuar con cautela. Una comunicación clara es clave. La independencia aporta credibilidad y debe protegerse. • La política fiscal debe centrarse en garantizar la sostenibilidad y el margen de maniobra. Los países con bajos déficits y deudas pueden utilizar el margen fiscal para invertir en áreas esenciales como la seguridad energética. Sin embargo, en países con margen fiscal limitado, los gobiernos deben reasignar el gasto o aumentar los ingresos fiscales. Prioridad dos: tomar medidas decisivas para impulsar el potencial de crecimiento. Un nuevo estudio revela que las reformas internas en la región CESEE podrían elevar el PIB en un 7 % a medio plazo. Este potencial se eleva hasta el 9 % en los Balcanes Occidentales. • Se esperan mayores ganancias de productividad derivadas de una mejor educación, mercados laborales más eficientes que permitan el desarrollo del talento y la reducción de la burocracia. En los Balcanes Occidentales y en los países que aspiran a integrarse en la UE, cerrar las brechas de gobernanza con la frontera de la UE ofrece el mayor beneficio. La necesidad de actuar con decisión es imperiosa. Prioridad tres, y la última pero no menos importante: los países CESEE deben asegurarse de conservar los beneficios de su integración económica con Europa y la economía global. • La integración ha sido una fuente importante de transferencia de conocimiento y de capitalización, en particular a través de la inversión extranjera directa (IED). Al igual que ocurre en toda la UE, la región CESEE se beneficiaría de un mayor progreso en la consolidación del mercado único de la UE. • Nuestro análisis muestra que las barreras internas añaden costes significativos: para los bienes, equivalen a aranceles del 44 %, y para los servicios, a un asombroso 110 %. La culminación del mercado único puede ser un factor clave para fortalecer el rendimiento de la economía de la UE y aumentar su atractivo para la inversión. • En un próximo documento de trabajo sobre las prioridades de reforma de Europa, describimos varias medidas concretas : un mercado eléctrico más integrado; más capital para las startups; mejor movilidad laboral transfronteriza; y una normativa más sencilla. En conjunto, estas medidas podrían incrementar el PIB de la UE en aproximadamente un 3 % durante los próximos diez años. • Además, argumentamos que el presupuesto de la UE puede ser más eficaz. Vincular los fondos de la UE para inversión pública al progreso en la implementación de las reformas resultaría en una doble ventaja: mayor financiación fiscal central y un uso más eficaz de la misma. Con esto, permítanme concluir. En el FMI, estamos listos para apoyarlos, como siempre lo hemos hecho. Mediante nuestra supervisión y asistencia técnica, nos comprometemos a ayudar a la región de Europa Central y Oriental a desarrollar su potencial de crecimiento. La creciente demanda que observamos para el desarrollo de capacidades del FMI, incluyendo la gestión de la inversión pública y la banca central, demuestra nuestro papel como socios en su búsqueda de un crecimiento más rápido y una mayor resiliencia. La región se encuentra en una encrucijada. Ante dificultades estructurales y un entorno externo mucho más volátil, es fundamental revitalizar las reformas internas para sortear las dificultades y liberar el potencial de la región para avanzar más rápido. Es hora de actuar. Con decisiones decisivas, podrá transformar los desafíos actuales en oportunidades y diseñar un futuro más prometedor para la región. ¡¡¡Comparte!!! Ya tú sabes…