Valentín Gómez Farías, vida y obra Valentín Gómez Farías nació el 14 de febrero de 1781, en Guadalajara, Jalisco. De acuerdo con informacion de la CNDH, fue médico, diputado liberal y presidente de México durante varios periodos breves. Suprimió la Universidad Pontificia de México y creó en su lugar la Dirección General de Instrucción Pública para el Distrito y Territorios de la Federación. En ese momento, se consignaron varias propiedades de la iglesia que sirvieron para crear nuevos organismos, como el Establecimiento de Ciencias Médicas (hoy la Facultad de Medicina); una biblioteca nacional; y el Establecimiento de Bellas Artes que debía ocuparse de museos e institutos. En 1807 se graduó en la carrera de medicina, ejerciendo en Aguascalientes. Fue ahí donde inició su actividad política al ser elegido regidor del ayuntamiento en 1820, gracias a su destacada labor social. Entre el 7 de noviembre de 1823 y el 24 de diciembre de 1824 participó como diputado por Zacatecas en las sesiones del Congreso Nacional Constituyente, asumiendo como ideología al federalismo. El 28 de diciembre de 1824 rindió protesta como senador por el estado de Jalisco, siendo reelecto en 1826. Llegó a presidir el Senado. Gómez Farías nunca llegó a ser presidente de México, pero fue varias veces vicepresidente en ejercicio de la presidencia, sobre todo cuando ésta estuvo a manos de Antonio López de Santa Anna, y durante la intervención estadunidense. Reformista por convicción, en 1833 se dio a la tarea de organizar el gobierno y contribuyó con el estado de derecho al sentar las bases jurídicas para la separación de la Iglesia y el estado, y abolir los privilegios del clero y el ejército. Fue quien antepuso el principio de supremacía del Estado laico en los asuntos de orden civil. Entre los datos más relevantes de este personaje podemos destacar el haber promovido importantes iniciativas, leyes y decretos, tendientes a reformar el Gobierno: proponían tanto la libertad de pensamiento y de expresión como la prohibición de la intervención del clero y el ejército en asuntos políticos, y obligaban a la desamortización de los bienes de la iglesia. En su opinión, estas propiedades no eran utilizadas en beneficio de los mexicanos, e impedían el desarrollo de la nación. Dichas iniciativas provocaron el descontento de los conservadores y fueron detenidas cuando Santa Anna retomó las riendas del país a finales de 1833, derogando las reformas liberales. Las leyes de Gómez Farías rompían el monopolio de la Iglesia en la enseñanza, y extendían las posibilidades de adquirir estudios y educación mediante la apertura de escuelas nocturnas para jóvenes trabajadores y la creación de escuelas normales para maestros. También clausuró la Real y Pontificia Universidad de México, herencia virreinal, ya que por el carácter religioso de su educación no podía satisfacer las necesidades de la sociedad del México independiente. La clausura, modernizadora, abrió una nueva etapa para la educación nacional. Debido a que, durante sus mandatos presidenciales instrumentó una serie de acciones que se conocen como La Pre-Reforma, se considera a Valentín Gómez Farías como el “Padre del liberalismo mexicano”. Ideólogo liberal le da profundo sentido al liberalismo latinoamericano Valentin Gómez Farías era médico de carrera, pero desarrolló mucha capacidad en la técnica jurídica, merced a su claridad de pensamiento a su conocimiento de los fundamentos del derecho. Defensor de las Libertades y la igualdad social; es inspirador de Benito Juárez, quien asimila conceptos de la obra de Valentín para consolidar la Constitución de 1857 y las Leyes de Reforma de 1959. Falleció en la Ciudad de México el 5 de julio de 1858. Sus restos fueron trasladados a Mixcoac, para ser inhumados en el jardín de su casa. Años después, el 24 de marzo de 1868, su nombre se inscribió en letras doradas en el recinto de sesiones del Congreso de la Unión. Se conmemoró el 164 aniversario luctuoso, este pasado 5 de julio. Comunicar es compartir ¡¡¡Comparte!!! Ya tú sabes