El Día Mundial del Medio Ambiente.

El cinco de junio se conmemoró el día mundial del medio ambiente; sumidos en el vértigo de las elecciones, ni lo vimos pasar. Justo es que lo reconsideremos, porque es vital para los seres humanos; la vida misma del planeta en detrimento constante.

Durante demasiado tiempo, hemos estado explotando y destruyendo los ecosistemas de nuestro planeta. Cada tres segundos, el mundo pierde una superficie de bosque equivalente a un campo de fútbol y, tan solo en el último siglo, hemos destruido la mitad de nuestros humedales. El 50% de nuestros arrecifes de coral ya se han perdido y para 2050, podrían desaparecer hasta el 90%, incluso si el calentamiento global se limita a un aumento de 1.5°C.

La pérdida de los ecosistemas está privando al mundo de sumideros de carbono, como los bosques y las turberas, en un momento en que la humanidad ya no puede permitírselo. Las emisiones globales de gases de efecto invernadero han aumentado durante tres años consecutivos y el planeta está a un paso de un cambio climático potencialmente catastrófico.

Somos testigos en la provincia Veracruzana de como la tala inmoderada de la sierra del Pico de Orizaba y hasta el Cofre de Perote; las inmediaciones de la Capital Xalapa han perdido tantos árboles que han desaparecido los bosques de niebla de Coatepec y Xalapa; el clima de las altas montañas es menos húmedo y más extremo, llueve muy fuerte pero no muy seguido y la temperatura es más alta.

Escasea el agua potable, los glaciares de las altas montañas desaparecen, los ríos de bajada pierden caudal; el aumento de la población y el poco cuidado del agua, hace que falte; cada día disponemos de menos agua e invertimos menos en ciencia y Tecnología para buscar soluciones.

En Israel ya tienen tecnología para usar agua de mar y convertirla en potable.

En Córdoba no podemos tener una sola planta de tratamiento de aguas residuales en operación, ni el rastro municipal que descarga sobre nuestro principal cuerpo de agua el río San Antonio; y hay varias descargas de drenaje en cuerpos de respuesta rápida en la ciudad, sin contar la basura.

La contaminación de nuestros cuerpos de agua los convierte en focos de infección; la basura que tiramos en la calle va a parar a las coladeras y atarjeas del drenaje público. Además de contaminar se convierten en barreras que provocan encharcamientos y a veces inundaciones. Una colilla tarda decenas de años en degradarse además de su contenido tóxico de alquitrán y carbonos.

Los gases carbónicos, de fábricas y automotores son factor para el calentamiento global al crear capas de gases que tienen efecto invernadero, que no dejan pasar los rayos del sol ni circular el aire con libertad concentrando gases tóxicos como el smog.

Ante este gran problema, el Día Mundial del Medio Ambiente se centra en la restauración de ecosistemas con el lema "Reimagina, recrea, restaura". ONU.

Restaurar los ecosistemas significa prevenir, detener y revertir este daño, pasar de explotar la naturaleza a curarla. Para ello, y precisamente en el Día Mundial del Medio Ambiente, (5 de junio) arrancó el Decenio de las Naciones Unidas sobre la Restauración de Ecosistemas (2021-2030), una misión global para revivir miles de millones de hectáreas, desde bosques hasta tierras de cultivo, desde la cima de las montañas hasta las profundidades del mar. Solo con ecosistemas saludables podemos mejorar los medios de vida de las personas, contrarrestar el cambio climático y detener el colapso de la biodiversidad. ONU.

Todos podemos ayudar tirando la basura en su lugar, nunca en la calle; cuidar el agua, apagar las luces que no se necesitan, afinar los vehículos de combustión; no tire su chicle usado en la calle, además de contaminar son focos de infección y afeamiento de la calle; descacharrice, piense que las desgracias como inundaciones, incendios tienen que ver con la mano de los humanos. Aquí, es impostergable, buscar la unidad de todos por el bien de nuestros hogares, de nuestras familias y luchar contra la contaminación, contra la suciedad y el derroche del agua. Hagamos conciencia común.

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