Libros de Texto Gran polémica nacional ha provocado la publicación de los libros de texto gratuitos; sin duda son de gran importancia nacional, son un instrumento de guía para la educación de generaciones de estudiantes, es el futuro de México. Literal, hablamos del futuro de la patria.

Así, resulta sano que se desglose y analice el contenido de los libros; pero se debe hacer por los especialistas: Pedagogos, Profesores, Educadores y especialistas en ciencias sociales, ciencias exactas. Con el debido respeto la crítica sin análisis resulta como votar en contra del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México si conocer los pros y los contras, sin saber lo que implica y resuelve; y resulta que costó ciento cincuenta mil millones de pesos de manera directa y trescientos MMP de manera indirecta (y se fueron al caño), más lo que costó el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles; lo que no le invirtieron al Aeropuerto Benito Juárez y que ahora es necesario invertir en las dos secciones que tiene. Imaginen los costos de una decisión que no analizaron los que debían hacerlo.

La importancia de los Libros de Texto merece dedicarles todo el estudio y análisis necesario por los especialistas. Sin duda hay que corregir los gazapos, errores de sintaxis y ortografía. Las voces que alegan la tendencia ideologizaste deberán ver el nivel de este efecto. Hay que mencionar que el primer gran moderador es el maestro y también la familia; parece que hay obligación de la familia de vigilar lo que a sus hijos les inculcan y estar en contacto amistoso con el o los maestros para, de común acuerdo impartir la educación que a su cultura, a las costumbres, al sentido común de ese segmento social regional, acomode.

Es fundamental promover la lectura, que aún hoy día tiene un gran déficit social; somos una sociedad que lee muy poco y esta es la base del crecimiento intelectual, del incremento de la capacidad mental ni se diga de la capacidad cognoscitiva. Surge una inquietud sobre la inducción de los niños hacia el comunismo, y no se ve porque, debiera preocupar algo que va desapareciendo, estaba en medio mundo; ahora ni Rusia que era la URSS, institucionalmente solo queda Corea del Norte y Cuba, sumidos en un muy bajo nivel social; probado está que como sistema el comunismo no funciona, ni China ha permanecido en el sistema comunista; Rusia y China conservan gobiernos centralistas pero avanzan hacia los mercados con estrategias muy eficientes.

Ideológicamente lo que parece ser el cáncer moderno es el populismo, que hemos visto en los últimos 20 años como ahogan una nación como Venezuela que es riquísima en recursos naturales, las mayores reservas en el mundo de petróleo y no avanzan, retroceden.

Leer a Karl Marx debería ser lectura obligada, como el Quijote de La Mancha, Adam Smith, y un sin número de libros y autores de alta influencia en la sociedad moderna; hoy día deberían ser los padres los que leyeran los libros que pudieran cuestionar para la educación de sus hijos. Un dato: Marx no predicó el comunismo, habló de la explotación de los trabajadores, de las grandes distancias entre las clases sociales de su tiempo; hoy día podemos encontrar ejemplos por excepción pero la clase social más numerosa es la clase media.

En México hablamos de 50 millones de pobres porque no se tienen los estándares que la ONU señala como mínimos para la vida digna, y en sus condiciones se encuentra el esparcimiento, atención a la salud completa, alimentación suficiente y sana; educación y vivienda digna para todos y siendo sinceros no llenamos a cabalidad estos segmentos, pero somos un poco más de 50 millones de clase media. Entonces deberíamos aumentar nuestro consumo de libros por necesidad para entender muchas cosas y no ser arrastrados por corrientes propagandísticas de tiros y troyanos. Cabe mencionar que hay libros muy divertidos y otros muy interesantes. La solución de todos nuestros problemas, es la educación, la educación nos dará un mejor nivel de vida, la educación también es cultura y la cultura es educación ética y moral, también. Es vital entender la Democracia, La República, La justicia y Las Leyes que nos rigen; la filosofía que da lugar a estos conceptos. Imprescindibles en un ciudadano consciente.
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